EL SUPREMO ENGAÑO DEL DOGMA DE LA "INMORTALIDAD DEL ALMA"...




 EL SUPREMO ENGAÑO del dogma de la "inmortalidad del alma"...es que hace obsoleta la resurrección de los muertos. En 1 Corintios 15, Saulo hace su defensa de la resurrección alegando que, de no haber resurrección, tampoco el Mesías resucitó, y si el Mesías no resucitó, tanto nuestra fe como nuestra predicación son totalmente vanas. ¡De nada sirve que se predique un "evangelio" que no ve en la resurrección es la única esperanza de cualquier tipo de vida después de la muerte! Además, si las "almas inmortales" de los creyentes ya están en "la presencia del Señor" o se han "ido con el Señor" a disfrutar de vida eterna en el cielo, ¿para qué predicar una resurrección futura cuando "venga el Señor"? Piense en eso, si ya los creyentes tienen vida eterna y van al cielo a ocupar unas supuestas "mansiones celestiales", ¿para qué una resurrección de muertos? Un dogma así echa por tierra una doctrina bíblica. Otro punto es el sieguiente:

Según Saulo, la inmortalidad es algo que se busca, ¿cómo es que, según el dogma, ya se posee inherentemente?

Saulo argumenta que en el día del juicio, Dios "pagará a cada uno conforme a sus obras (no según "la sola fe"): Vida eterna a los que perseverando en hacer el bien, BUSCAN gloria, honor e inmortalidad" (Rom 2:6-7).
Y...lo que uno ya tiene, ¿porqué tene que buscarlo? Según el apóstol Pablo:

"nosotros mismos, que tenemos las primicias del espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando ansiosamente la adopción, la redención de nuestro cuerpo. Porque en esperanza fuimos salvos, pero la esperanza que se ve, no es esperanza, porque ¿para qué esperanzarse en lo que alguno ve? Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo esperamos ansiosamente" (Rom 8:23-25).

En otras palabras, si ya tenemos un "alma inmortal" ya tenemos la inmortalidad, ¿ya para qué esperar una resurrección o la redención de nuestros cuerpos? Lo que uno ya tiene, ¿para qué esperarlo?
Pero, hay más argmentos en contra del dogma de la "inmortalidad del alma". Jesús nunca habló de eso, al contrario, dijo que vendrá la hora en que "en que todos los que yacen en los sepulcros oirán su voz, y los que hicieron° lo bueno saldrán a resurrección de vida, pero los que practicaron lo malo, a resurrección de juicio." (Juan 5:28-29).
Evidentemente Jesús no pensaba que las "almas inmortales" de las personas buenas estaban en el cielo, y que las almas de los malos estaban en un "fuego de tormentos eterenos", sino que tanto los unos como los otros estaban en el sepulcro esperando oir su voz (cuando él regrese) para salir y recibir sus respectivas recompensas.

El argumento Paulino es que "así como en Adam todos mueren, así también en el Mesías todos serán vivificados o resucitados"...Cada uno u en su respectivo orden, el Mesías fue resucitado como "primicias de los que durmieron (en el sueño de la muerte); lugo los que pertenecen al Mesías, cuando él venga...(1 Cor 15:20-23).

Finalmente, tenemos a Apocalipsis 20, donde leemos que, tanto el mar, como la muerte y el sepulcro darán los muertos que hay en ellos, que la muerte y el sepulcro serán eliminados en la "muerte segunda" representada por un "lago de fuego"...y que los muertos estarán de pie (resucitados) y que serán juzgados según sus obras, o las cosas que estén escritas eb ciertos "libros". Todo sto implica una resurrección, un juicio, un veredicto y una sentencia final y definitiva. Pero, una cosa es patente: ¡TIENE QUE HABER UNA RESURRECCIÓN! Y para que haya una resurrección de muertos, no se puede estar vivos en ningún lugar, de ninguna manera y en ninguna forma.
EN FIN, LA ÚNICA ESPERANZA DE VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE, ES SOLO Y EXCLUSIVAMENTE LA RESURRECCIÓN DE ENTRE LOS MUERTOS LIDEAREAD POR EL MESÍAS, EL CUÁL, FUE EL PRMERO N SER RESUCITADO DE ENTRE LOS MUERTOS A INMORTALIDAD, Y YA NO MUERE MÁS, NI LA MUERTE SE ENSEÑOREARÁ MÁS DE ÉL (ROMANOS 6:9).

SHALOM PARA TODOS.

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