Es tiempo ya de desechar el misticismo que rodea la figura del Mesías Jesús...desechemos los dogmas que, en vez de exaltar al Mesías, insultan nuestra inteligencia elevándolo a una categoría que él nunca reclamó para sí. Nada del misticismo de "Dios de Dios, luz de luz, creado pero no engendrado, 100% hombre y 100% Dios" del romanismo y el protestantismo extraviados. Todos lo méritos que Jesús pueda tener están basados sobre su humanidad, no sobre una supuesta divinidad, Jesús jamás reclamó ser un ser divino, ni siquiera cruzó por su mente ser Dios ni igual a Él. A menos de que no rechacemos todo el misticismo sobre la figura de Jesús agregado por los sistemas de religión, no podremos conocerle bien, y estaremos en riesgo de ser guiados a la idolatría.
Hechos 2:22:
"Varones israelitas, oíd estas palabras: Jesús de Nazaret, varón aprobado por Dios entre vosotros con las maravillas, prodigios y señales que Dios hizo entre vosotros por medio de él, como vosotros mismos sabéis".
UNA VEZ MÁS se afirma acerca de Jesús que es "UN VARÓN"...¿Qué es es ser un varón en el sentido bíblico y esencial de la lengua española? ¡Es ser un hombre! Un ser humano de sexo masculino. Esto denota que Jesús, como "hijo del hombre", como uno "nacido de mujer", era, es, y siempre será un hombre. La designación como "hijo de Dios" no lo hace divino, no le otorga divinidad alguna, pues, esa expresión, muchos siglos antes de que se inventara el fatídico dogma de la Trinidad, lo que designaba era a un Mesías que sería un descendiente sanguíneo del rey David, y eso, por vía paterna, no por vía materna.
Jesús, en otras ocasiones fue identificado como "hijo de David" (Mateo 1:22; Mateo 15:27; Marcos 10:47; Lucas 18:38)...Decir que Jesús era hijo de David es sinónimo a decir que era hijo de Dios.
Por eso, cuando Nathan-El vió a Jesús, le llamó "Hijo de Dios" y "rey de Israel".
"Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel"— Juan 1:49.
¡Claro que Nathan-el no era trinitario...ni veía en Jesús a un "Dios encarnado", sino al futuro Rey de Israel, al Mesías descendiente sanguíneo del rey David, como "hijo de Dios".
Otro que tenía ese mismo concepto judío de "hijo de Dios" era el sumo sacerdote (que era Saduceo, y no creía ni espíritus ni en ángeles), le preguntó a Jesús: "¿Eres tú el Mesías, el Hijo del Bendito?" (Marcos 14:61). ¿¿Nota la correlación entre el Mesías y el hijo del Bendito (Dios)? El sumo sacerdote no era trinitario, era Judío, probablemente Saduceo, él tenía bien claro que el Mesías, que sería descendiente directo del rey David era conocido como hijo del Bendito (es decir, de Dios)...Nada que ver con ninguna "trinidad" ni ninguna "segunda persona divina"...Esos conceptos era totalmente desconocidos en el entorno Judío.
Jesús fue también se identificó a sí mismo como "el hijo del hombre"...es decir como un "Ben Adam"...hijo de Adam...esto reafirma su humanidad...que era un ser netamente humano y no alguna especie de avatar, ni un ser preexistente o ser o conciencia celestial. Jesús era, es, y siempre será un ser humano. Fue muerto, fue resucitado por Dios, le fue concedida la inmortalidad en su resurrección (Romanos 6:9), ¡fue el primer hombre en ser resucitado a inmortalidad entre los hijos de Adam!
"Porque, habiendo venido por un hombre la muerte, también por un hombre viene la resurrección de los muertos.
Pues del mismo modo que en Adán mueren todos, así también todos revivirán en Mesías.
Pero cada cual en su rango: Mesías como primicias; luego los de Mesías en su Venida" — 1 Corintios 15:21-23.
¡De ahí nuestra esperanza de resurrección a inmortalidad cuando el Mesías venga! ¡Él es el hijo mayor entre muchos hermanos! (Romanos 8:29).
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