EL INFIERNO DE TORMENTOS ¿SERÁ CIERTO?

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¿Qué es el infierno? ¿Qué sucede allí realmente? ¿Será verdad que los incrédulos, hombres y mujeres, paganos, niños y recien nacidos sufren tormento eterno en un fuego ardiente, mientras los justos gozan de felicidad eterna en el cielo?
Durante siglos sacerdotes y lígeres eclesiásticos han ilustrado en detalles espeluznantes el sufrimiento de los incrédulos en el infierno, un eterno incinerador donde el fuego quema pero no consume. Los clérigos han escrito y predicado que el gran Creador está satisfecho de tener millones de sus criaturas retenidas en tortura abrasadora, de la cual no hay escape por años, cientos, miles, y hasta millones de años. He aquí el comentario del teólogo Metodista Joseph Benson:
"Diso mismo está, por consiguiente, presente en el infierno para ver el castigo de estos rebeldes contra su gobierno, su furia encendida aumenta la llama de su tormento...y vuelve sus poderes más agudamente sensibles, poniendo el mas cortante filo sobre su dolor, haciéndolo cada vez más intolerable. Él {Dios}, usará todos sus atributos divinos para hacerlos tan desdichados por toda la eternidad cuanto permita la naturaleza de ellos".
En su sermón No. 369 el conocido predicador C.H. Spurgeon expresa:
"Cuando la pobre alma se encuentre en las manos de furiosos demonios, parecerá en ese momento como si hubira estado sedienta por unos mil años...¡Aquí estoy en el infierno!"
Aunque parezca extraño, este terrible concepto de justicia nunca sería tolerado entre los seres humanos como algo lógico y retributivo. Por ejemplo: Si se supiera que alguno hubiera atormentado a un animal en un fuego, aún por unos minutos, tal acto sería considerado como un crimen horrendo. Hombres y mujeres se encenderían en ira contra el agresor, mientras que un juez se expresaría con repugnancia y daría al autor del crimen una pesada condena.
También, si alguien quemara a un ser humano en fuego o expusiera a un hombre o una mjer a una llama, todo el mundo se levantaría en condenación, sin importar si el que sufre las quemaduras es culpable de algún crimen. La opinión pública no permitiría tan espantosa atrocidad. ¿Es Dios menos justo que los hombres? ¿No estarán sus normas de justicia má altas que las de los hombres?
Nuestros tribunales someten a juicio a personas acusadas de ofensas, y si son encontradas culpables, el juez sentencia; la ofensa es entonces purgada. Nadie puede ser castigado dos veces por el mismo crimen. Pero os líderes eclesiásticos nos dicen que e el tormento del infierno la culpa del pecador jamás es purgada y como castigo por los hechos de unos limitados 70 años de debilidad humana, es posible sufrir tortura en las llamas del infierno por millones de años sin ninguna esperanza de liberación o alivio.
Añadiendo confusión a esta terrible enseñanza, los mismos maestros enseñan la resurrección del cuerpo. ¿Para qué? Aquí realmente está el gran dilema de ellos. No puede ser para propósito de juicio, porque se nos dice que los pecadores ya están siendo castigados en el infierno desde hace siglos. ¿Quién sugerirá que Dios ha cometido un error y que el juicio será necesraio posteriormente para averiguar si aquellos que ya estan sufriendo han sido castigados con justicia en el fuego del infierno? ¡Que espantoso desorden de pensamiento!
¿Quién oyó jamás de un malhechor que fuera castigado primero y posteriormente traído a juicio? ¿Qué pasaría si este extraño concepto de justicia fuera practicado en nuestros tribunales humanos? ¡Sería una completa confusión, un tremendo caos!
Ahora apliquemos el sentido común a esta cuestión. ¿A dónde va el cuerpo al morir? Pues es enterrado en el suelo o destruido en el crematorio. Lo que es destruido no tiene sentimientos, y el cuerpo enterrado no tiene sensaciones. ste puede ser exhumado; podemos verlo. Sabemos que está allí, pero está sin vida y pronto comienza a descomponerse, confirmando la verdad de la sentencia de Dios en Génesis 3:19: "Polvo eres, y al polvo volverás".
Por consiguiente, esta claro que el cuerpo material no está sujeto a ningún tormento en la tumba. ¿Cuál es el cuerpo que supuestamente siente dolor y experimenta castigo? Debe tener cerebro para sentir dolor, debe tener dedos, manos, pies, tronco, etc. para ser afectado por el fuego. ¿De dónde se consigue tal cuero? ¿Qué sucede cuando este supuesto nuevo cuerpo tiene que ser desechado para permitir la resurrección del viejo cuerpo terrestre (porque muchos líderes eclesiásticos estan de acuerdo con la realidad de la resurrección)? Si uno consigue un nuevo cuerpo al morir, ¿no sería entonces incorrecto castigar este cuerpo que nunca pecó? ¡Que terrible confusión de ideas! Por supuesto, muchosn pensarán en el alma del hombre, la cual se piensa que es el hombre mismo su esencia eterna que nunca muere. Pero si el alma es la parte pensante de la persona, y si es inmortal, puede pensar desde el comienzo de la vidad. Pero, ¿quién de nosotros puede recordar el día en que nació, o aún dos años despues?
La Palbra de Dios es muy clara sobre este asunto. Si investigamos el significado de la palabra "alma" en la Biblia, encotraremos que significa "persona", "ser viviente", o "vida". Usted puede comprobar esto por si mismo. ¡LA PALABRA DE DIOS NO DICE NADA ACERCA DE PERSONAS QUE ESTEN SUFRIENDO EN EL INFIERNO, O QUE VAYAN A ALGÚN LUGAR DE SUFRIMIENTOS O DE FELICIDAD AL MORIR!
Eesa idea no se encuenta en ninguna parte de la Biblia.

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