¿ES CONTRARIA LA FE Y LA TORÁ? ¿QUÉ NOS DICE LA ESCRITURA?

 

 {{"Por fe Noé, habiendo sido advertido por revelación acerca de cosas que aún no habían sido vistas, movido por temor reverente, preparó el arca para la salvación de su familia. Por fe él condenó al mundo y llegó a ser heredero de la justicia que es según fe" (Heb 11:7).
En la Carta a los Hebreos se dedica todo un capítulo, toda una sección al asunto de la fe, hay un motivo muy importante para ésto, pues el Pueblo Santo fijó siempre la atención en la estricta letra de la Torá y ejercía su servicio basado en lo exterior, o, como lo pone Pablo mucho mas tarde, anduvieron según la carne. Éste fue su problema:

"Porque también a nosotros, como a ellos, nos han sido anunciadas las buenas nuevas; pero a ellos de nada les aprovechó oír la palabra, porque no se identificaron por fe con los que la obedecieron" (Heb 4:2).

No se trató nunca de que la Torá fuese "una carga imposible de llevar", como alegan algunos, pues leemos en Devarim 30: 11, 14:

"Ciertamente este mandamiento que te mando hoy no es demasiado difícil para ti, ni está lejos....muy cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón, para que la cumplas".

También Yeshua resalta esto al señalar a los Escribas y a los Fariseos en los siguientes términos:

"¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello" (Mateo 23:23).

Es decir, el diezmar aquellas cosas y el obedecer la Torá era muy necesario, pero el problema consistía en que olvidaban LO MÁS IMPORTANTE DE LA TORÁ, LA JUSTUCIA, LA MISERICORDIA Y LA FE.

Estas cosas nos muestran como se puede caer en un estricto obedecer de la Torá y obviar lo más importante de ella, el fundamento mismo, hacer justicia, ser misericordiosos y sobre todo caminar y obrar en fe. ¡Esa es la fe que obra por el amor!

"Con Yeshua, ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor" (Gál 5:6). Es decir, el tener una marca hecha a mano en el prepucio o no tenerla no tiene valor (aunque sí lo tiene y lo tuvo para todo varón Judío), pero palidece ante la fe que opera a otro nivel, al nivel del amor.

"Pero sobre todas estas cosas, vestíos de amor, que es el vínculo perfecto" (Col 3:14).

Nosotros como seguidores de Yeshua, debemos cuidarnos, ya que "También a nosotros, como a ellos (los hebreos antiguos), nos han sido anunciadas las buenas nuevas"...¿Qué significa eso de que a nosotros también, COMO A ELLOS nos han sido anunciadas las buenas nuevas"? ¡Ah! Significa que las buenas nuevas no son tan nuevas...que ya habían sido anunciadas antes, al Pueblo santo en la falda del monte Sinaí. Todo está conectado con la Torá, la fe no es contraria a la Torá, está basada en la Torá. Todos estos hombres que se mencionan en todo este capítulo 11 de Hebreos fueron hombres de fe y hombres obedientes de la Torá, las Instrucciones de Dios para vida.
Cierto, la Torá contiene leyes y contiene ritos y una liturgia para regirse por ellos, pero esos no son la Torá, porque en fundamento de la Torá es el amor, la justicia, la misericordia y la fe. Por eso se nos dice:

"No debáis a nadie nada, salvo el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo ha cumplido con la Torá. Porque los mandamientos—no cometerás adulterio, no cometerás homicidio, no robarás, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento — se resumen en esta sentencia: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
El amor no hace mal al prójimo; así que el amor es el cumplimiento de la Torá" (Rom 13:8-10).

Pablo tambien no dice que "las buenas nuevas" fueron anunciadas de antemano a nuestro padre Abraham (Gál 3:8)...¡y Abraham era un hombre de fe! Abrahan, no solo circuncidó su carne, si no que también circuncidó su corazón...¡ Y este fue siempre el llamado del Eteno a su pueblo, que circuncidaran sus corazones y no solo su prepucio!

"Circuncidad, pues, el prepucio de vuestro corazón, y no endurezcáis más vuestra cerviz" (Devarim 10:16).

¡A nosotros se nos han circuncidado nuestros corazones en la circuncisión del Mesías, de modo que no somos incircuncisos aunque no tengamos la circuncisión en nuestra carne, exteriormente, ya que la verdadera circuncisión es la del corazón.

"la circuncisión es la del corazón, en espíritu y no en la letra. La alabanza del tal no proviene de los hombres, sino de Dios" (Rom 2:29).

Nosotros, como Noaj y como toda aquella "grande nube de testigos" (Heb 12:1) debemos movernos en fe, en fe obediente, con toda reverencia ante nuestro Padre celestial, no desechado la Instrucción (Torá), sino obedeciendo de corazón y en forma espiritual los grandes principios enunciados en la Torá, pero sin los ritos ni las ceremonias, sin nada de la liturgia, y mucho menos con los preceptos judaicos añadidos como un cerco a la Torá, ya que los Judíos (con raras excepciones) se concentran en el "cerco" y de esa manera invalidan la Torá con sus tradiciones halajicas.

¿Qué significa Halajá?

La Halajá es pues el sendero señalado por la tradición, por el cual debe transitar todo judío. Mishné Torá es el nombre de una de las obras de Rambam (Maimóni- des), conocida también como “Leyes de los Fundamentos de la Torá” (Hiljot iesodé haTorá).

Fue por ese conjunto de tradiciones halájico que Yeshua se enfrentó al Judaísmo de Su día. Ellos dejaban sin efecto la Torá por sus tradiciones.

"Yeshua les respondió diciendo: —¿Por qué también vosotros quebrantáis el mandamiento de Dios por causa de vuestra tradición? Porque Dios dijo: Honra a tu padre y a tu madre, y El que maldiga a su padre o a su madre muera irremisiblemente.
Pero vosotros decís que cualquiera que diga a su padre o a su madre: 'Aquello con que hubieras sido beneficiado es mi ofrenda a Dios' no debe honrar a su padre. Así habéis invalidado la palabra de Dios por causa de vuestra tradición" (Mateo 15:3-6).

"Bien invalidáis el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradición" (Mar 7:9).

"Así invalidáis la palabra de Dios mediante vuestra tradición que habéis trasmitido, y hacéis muchas cosas semejantes a éstas" (Mar 7:13).

En conclusión, la fe confirma la Torá, no es contraria ni opuesta a ella, los que erróneamente piensan que la Torá ha sido ya abolida, o que fue "clavada en la cruz", no enteinden que están respaldando una falacia teológica inventada por hombres que, ya sea conciente o inconcientemente son "corruptos de entendimeinto". Como dice el Salmista: "La Torá de Adonai es perfecta" (Salmo 19:7), es inmejorable, lo perfecto no se puede mejorar sobre la marcha, es perfecto, la Torá es perfecta como salió de la boca de Adonai.
Pero que no podemos adherirnos solo a la letra de la Torá, sino al espíritu de ella...Yeshua dijo que las palabras que él hablaba, su enseñanza, no era propia suya, sino que como Dios le dio que hablase, él habló, y añadió: "Las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida".

¡Shalom Aleijem!
¡La paz sea con ustedes!