EXPERIENCIA DE FE VERDADERA


Una corta reflexión sobre el bien y el mal.

El Tanaj o Escrituras hebreas nos muestran una experiencia de fe la cual reconocía a un solo Elohim (Dios) como causante del bien y del mal.

El asociar el mal con el Eterno como resultado de no seguir al pie de la letra sus instrucciones y mandamientos nos lleva a un crecimiento espiritual y madurez tremendo trayendo consigo una creencia sana que nos edifica y nos libera del temor.
El reconocer que el mal que viene a nuestras vidas es aprobado por el Eterno refleja un conocimiento del Eterno que no teníamos en teoría ni en la práctica.

Si el Eterno es nuestro Padre, entonces puede disciplinarnos y castigarnos.
Un niño castigado por su padre entiende que ha sido su desobediencia la que lo llevó allí.
Por no escuchar la voz de su padre, provocó la ira de éste y ahora se encuentra en una situación dónde solo su padre lo puede sacar de allí levantando el castigo.
El castigo o disciplina produce ira en aquel que no reconoce que ha fallado y justifica sus malas acciones. — Hebreos 12: 4-11

El que no reconoce que ha hecho mal, siempre buscará culpables porque ante sus ojos él es inocente.
El que seamos reprendidos y disciplinados por nuestros padres moldea nuestro carácter y nos hace mejores hombres y mujeres en el día de mañana, porque el castigo nos ayuda a separar lo bueno de lo malo y a elegir que tipo de reacciones debemos elegir ante la disciplina otorgada.
Si recibimos la disciplina como buena para nosotros saldremos aprendiendo de nuestras malas acciones.

Si recibimos mal la disciplina, nada aprenderemos evidentemente, y el castigo durará en ser quitado, porque no conocemos que quien ejecuta el castigo, lo hace para nuestro bien y porque nos ama.
Hoy en día muchos estamos corrigiendo esa enseñanza dualista que hemos recibido desde tiempos antiguos y que tanto daño ha hecho:

"Que de Dios viene lo bueno y del diablo lo malo".

Hoy, el comprender que el mal que nos acontece viene de parte del Eterno nos ayuda a entender el por qué, y el para qué; y nos acerca más a nuestro Padre y Creador.
El reconocer que detrás de todo lo malo que nos pasa está el diablo, nos saca al Eterno de nuestras vidas y hace nula la disciplina o enseñanza que él nos quiere dar a través de tales situaciones que nos mueven el suelo.

El creer que de Dios viene lo bueno y del diablo lo malo, hace que el Eterno tenga un semejante, alguien que está a su mismo nivel y por tanto exista tal expresión blasfema que muchos dicen: "Que si el diablo no existe, tampoco existe Dios".

El que muchas personas le teman más al diablo que al Eterno, refleja que tan fallida y dañina puede ser esta creencia para nosotros. Es mejor estar en las manos del Todopoderoso el cual nos ama con amor eterno.

El creer que un ser imaginario llamado diablo tiene autoridad para hacernos males suplantando el lugar del Eterno, refleja cuan desprotegida se encuentra tal persona, luchando con el viento sin saber a quien golpea sin entender los misterios que encierra la vida y las lecciones asombrosas que surgen del bien que aprendemos debido a los males que recibimos en nuestra peregrinación.
CONCLUSIONES
Tenemos ejemplos en la Biblia hebrea, de hombres que entendieron que el mal que les acontecía, venía de parte del Eterno.

José hijo de Jacob:
Génesis 45:5, 7-8

Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros.
Y Dios me envió delante de vosotros, para preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran liberación. Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra de Egipto.

¿Cómo se entiende que José diga que la acción malvada de sus hermanos al venderlo, no fue más que la forma que el Eterno utilizó para enviarlo a Egipto y así cumplir el propósito por el cual fue llamado por el Eterno?

Job
Job 1:21:

y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. YHVH dio, y YHVH quitó; sea el nombre de YHVH bendito.
Job 2:9-10:
Entonces le dijo su mujer: ¿Aún retienes tu integridad? Maldice a Dios, y muérete.
Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado. ¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios.

¿En dónde se encuentra la existencia de un supuesto diablo en las palabras de Job?
Job le atribuye al Todopoderoso la causa de todos sus males, y es por esa razón por la cual el Eterno luego lo prosperó.
Este es el resultado de tener una experiencia de fe verdadera y esto se comprueba aún en el Nuevo Testamento cómo está escrito:
Romanos 8:28
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.



Comentarios

Entradas populares de este blog

LA CARTA A LAODICEA (CARTA PERDIDA DEL APÓSTOL PABLO)

VÍA CRUCIS: UN ENGAÑO MÁS DEL CLERO VATICANO.

Diferencias entre un título y un Nombre