LO MAS IMPORTANTE ES EL AMOR GENUINO, NO FINGIDO.

 

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HERMANOS MÍOS QUERIDOS, el mandamiento mas grande es amar a Dios por sobre todas las cosas, que sea lo mas grande e importante en nuestras vidas, y al Prójimo como a uno mismo...no es guardar cuestiones de comidas y de bebidas, ni luna nuevas ni de sábados...Todo aquello era una sombra de JESUCRISTO, ya presente la realidad, que es JESUCRISTO, aquello que era sombra desaparece ante Su luz — Colosenses 2:16; Hebreos 7:19; 10:1,10,14. Mucho menos debemos juzgar a otros por esas cosas. Amémonos los unos a los otros con amor de verdad, no fingido...Recordemos las palabras de Sus Apóstoles:

"No debáis a nadie nada, salvo el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo ha cumplido la ley. Porque los mandamientos—no cometerás adulterio, no cometerás homicidio, no robarás, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento— se resumen en esta sentencia: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El amor no hace mal al prójimo; así que el amor es el cumplimiento de la ley"

— Romanos 13: 8-10; 1ª Corintios 13: 1-8.

No se nos dice que por ser religiosos y guardar estrictamente la letra de la Ley que se nos tendrá misericordia, sino que:

El amor cubrirá multitud de faltas...porque la misericordia triunfa sobre el juicio...porque EL QUE AMA AL PRÓJIMO HA CUMPLIDO LA LEY....¡Nada es mas importante que el amor genuino, el amor de verdad, el amor no fingido y la misericordia, que es mejor que cualquier sacrificio.

"Un mandamiento nuevo os doy: que os améis los unos a los otros. Como os he amado, amaos también vosotros los unos a los otros.

En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tenéis amor los unos por los otros" — Juan 13: 34, 35.

ANALICE Y PONDERE ESTO:

"El que come no menosprecie al que no come, y el que no come no juzgue al que come; porque Dios le ha recibido. Tú, ¿quién eres que juzgas al criado ajeno? Para su propio señor está en pie o cae; pero será afirmado, porque poderoso es el Señor para afirmarle.

Mientras que uno hace diferencia entre día y día, otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté convencido en su propia mente. El que hace caso del día, para el Señor lo hace. El que come, para el Señor come, porque da gracias a Dios; y el que no come, para el Señor no come, y da gracias a Dios. Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí. Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así que, sea que vivamos o que muramos, somos del Señor. Porque Cristo para esto murió y vivió, para ser el Señor así de los muertos como de los que viven" — Romanos 14: 3-9.

¡AMÉMONOS LOS UNOS A LOS OTROS COMO EL SEÑOR NOS HA AMADO! ¡NIGÚN DON SUPERA AL AMOR GENUINO!

Con todo, anhelad los mejores dones. Y ahora os mostraré un camino todavía más excelente: EL AMOR ES LO QUE NUNCA DEJA DE SER. — Romanos 12:31-13: 8.

¡Que el Señor nos ayude a entender qué es lo más importante!

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